3 museos de Mallorca que no puedes perderte
Históricos, científicos, culturales, etnológicos… Mallorca posee importantes museos en los que echar la vista atrás para, durante unas horas, viajar en el tiempo y conocer el patrimonio de la isla. Desde Mon Port hemos hecho una selección por los tres más interesantes y que no deberías perderte.
Así se vivía en Mallorca: la Finca Els Calderers
La Finca Els Calderers es una joya de la historia mallorquina porque es un auténtico testimonio viviente de cómo era la vida por aquel entonces.
Fechada en el siglo XIII, el edificio principal es una típica casa de Mallorca de tres pisos con un hermoso patio interior que recibe el nombre de Sa Clastra, y que tiene un estanque central que refresca y anima el ambiente. La construcción, de piedra de marés, incluye establos, corrales con animales autóctonos como el cerdo negro mallorquín, y dependencias de los principales oficios del medievo, como el taller del herrero, o la lavandería de piedra.
Els Calderers también es una casa museo de artes decorativas, piezas artísticas y muestras etnológicas. Ubicado en el municipio de Sant Joan, los visitantes pueden pasear y conocer las principales salas de la vivienda y las dependencias agrícolas, en las que destacan las herramientas y utensilios que se utilizaban en la “pagesia” tradicional.
Son Marroig, un homenaje al Archiduque Luis Salvador
La casa museo de Son Marroig se creó en el año 1922 con el objetivo de preservar y divulgar la figura del Archiduque Luis Salvador de Austria, un personaje muy importante de los últimos años del siglo XIX, quien se hizo con la propiedad de este conjunto.
En la finca se puede pasear por esta antigua propiedad del Archiduque, que históricamente era la pieza clave de la economía del mundo agrícola y ganadero de la isla. Poco a poco la posesión se ha ido adaptando al paso de los siglos y, precisamente por construirse en tiempos de piratas, tiene un marcado carácter defensivo y fortificado.
La estancia es de planta rectangular, con vigas de madera vista. A uno de los lados está la capilla, y por las escaleras se asciende a una torre del siglo XV que tenía por finalidad proteger las casas de los ataques de los corsarios que aprovechaban la noche y el cobijo de la roca de Sa Foradada para desembarcar y acceder a Valldemosa.
El museo del monasterio de Miramar, la joya fundada por Ramon Llull
En 1276 Ramon Llull fundó el monasterio y escuela de lenguas orientales en Miramar. Aquí los franciscanos aprendían árabe para poder ir a evangelizar los pueblos del norte de África.
Unos dos siglos más tarde, en 1487, este lugar hizo historia en Mallorca porque aquí se instaló la primera imprenta de la isla, cuando sólo hacía 25 años que Gutemberg la había presentado como un invento revolucionario que podía hacer libros de manera más rápida y eficiente.
Hoy día Miramar es un museo dedicado a Ramon Llull y al Archiduque Luis salvador, quien también tomó parte importante en la historia de este espacio.
El interior de la casa conserva el antiguo suelo del monasterio, así como la cocina de los monjes y una maravillosa virgen creada en mármol de Carrara, regalo de la emperatriz Sissi.
No os podéis perder la antigua almazara que hay en el exterior, ni el jardín bizantino o el claustro, donde se incluyeron unos arcos góticos que procedían del convento de Santa Margarita en Palma. Además, hay varios miradores desde los que disfrutar de paisaje: el de el Archiduque, Sa Ferradura, Es Llac u el del Jardí de la Torre del Moro.
Hoy sólo explicamos tres de las casas museo que podéis encontrar en Mallorca, pero permaneced atentos a este blog porque muy pronto desvelaremos otros lugares muy interesantes y que no os podéis perder.