Consejos para elegir el hotel perfecto
Antes de despejar la incógnita que da título a este artículo nos gustaría hacer una reflexión sobre el ‘hotel perfecto’.
¿Existe el hotel perfecto?
Es complicado, por no decir imposible, diseñar un lugar ideal capaz de satisfacer las necesidades de todos y cada uno de los tipos de clientes que existen: parejas, familias, amantes de la naturaleza o de la ciudad, gente del mar o gente que se inclina por la montaña, personas a las que les gusta el verano y otras que prefieren el turismo de invierno, grupos de amigos y grupos de amigas, jubilados que consolidan el arte de saber vivir (bien) y jovencitos que se inician en las mieles del viajar y descubrir nuevos lugares.
Puede que desde MON PORT nos cueste creer en el hotel perfecto que encaje en una sola descripción, pero desde luego sí creemos en el hotel capaz de satisfacer, sorprender y hacer felices a sus huéspedes desde el primer al último día.
El hotel que va un paso por delante de las peticiones y es capaz de prever las necesidades de un cliente antes incluso de llegar a convertirse en pensamientos.
El hotel que mima cada detalle y empatiza con sus huéspedes. El que tiene en cuenta las opiniones y es respetuoso con la tierra que le acoge. El que sabe que el cliente es lo primero, pero también vela por el bienestar de sus trabajadores.
El hotel cuidadoso con el medioambiente y siempre dispuesto a mejorar para conseguir la estancia perfecta. Un hotel que consigue el equilibrio perfecto entre las expectativas y la realidad.
El hotel que basa su estrategia en cientos, miles, de pequeños detalles que serán los que marquen la diferencia. El hotel que sabe que no sólo hay que poner el foco en atraer al público, sino en fidelizarlo.
Para nosotros, el hotel perfecto está hecho de amabilidad, limpieza, comodidad, tranquilidad, seguridad, ubicación y actitud. Mucha actitud.
Es por eso que, antes de saber cómo elegir vuestro hotel perfecto, debemos despejar una incógnita aún mayor:
¿Cómo es vuestro hotel perfecto?
Desde MON PORT esperamos encajar en vuestra definición y, por supuesto, poder superar con creces vuestras peticiones.